Los Estudios de Género, que tienen como objetivo la visibilización de los mecanismos de relación y construcción de las identidades, roles y expresiones basadas en el sexo y la corporalidad, han visto, en los últimos tiempos, un amplio desarrollo. Desde los primeros trabajos, que buscaban reflejar el papel que las mujeres habían tenido en la Historia, la Antigüedad ha estado presente en el discurso sobre los orígenes del patriarcado. Estas primeras investigaciones discutían el inicio de la sumisión de la mujer ante el varón y supusieron un importante avance en la creación de una serie de nuevos puntos de vista y el planteamiento de nuevas preguntas, a pesar de que hoy puedan considerarse superados e incluso erróneos. Así, aunque la mirada hacia Antigüedad ha sido algo recurrente, las nuevas miradas y perspectivas sobre el pasado necesitan siempre nuevos foros de debate y discusión. Por ello, convocamos el Congreso Internacional “La culpa es del Género: identidades, transgresiones e interconexiones en la Antigüedad”. Este encuentro está dirigido a todo tipo de investigadores que traten temas de Género centrados en el Mundo Antiguo o, aun no dedicándose específicamente a él, puedan aportar una visión enriquecedora al respecto.
A continuación se presentan unas líneas generales sobre las que irán estructuradas las diferentes sesiones, aunque no son exclusivas y aceptaremos otras propuestas que se relacionen con el tema principal del congreso. El objetivo es agrupar a los ponentes por temas de interés para fomentar el debate.
- Herencia del patriarcado. A pesar de los orígenes prehistóricos del patriarcado, es la Antigüedad el momento en el que se desarrolla y consolida. Esto se lleva a cabo a través de la creaciones de justificaciones jurídico-religiosas o de nuevos roles y modelos familiares. Por ello, podemos situar en la Antigüedad el origen de muchos comportamientos sociales actuales, que se naturalizan y asumen como normales.
- La mujer en la economía. Las mujeres han sido, en algunas ocasiones y momentos durante la Antigüedad, valedoras y poseedoras de bienes, aunque su papel en los asuntos económicos haya sido principalmente subordinado. Esto se ha traducido en su visibilización en la sociedad, así como en una capacidad de acción social importante a través, por ejemplo, del evergetismo. Del mismo modo, muchas veces, el silencio en las fuentes (textuales, epigráficas o arqueológicas) viene dado por una escasa capacidad de las mujeres para gestionar sus bienes o ejercer una posesión efectiva de los mismos frente a los varones de la familia.
- Educación y roles de género. La enseñanza segregada, la ausencia de educación en las mujeres o su crianza vinculada al papel de madres y esposas, mientras que los varones eran formados para una vida pública, enfocada a la guerra y la política, ha influido en la visión que tenemos a partir de las fuentes. En la actualidad, estas opiniones están siendo matizadas y comienzan a dibujar un cuadro menos global y más centrado en las particularidades de cada sociedad. Las excepciones, las variaciones según el estatus social y las singularidades de cada familia, permiten crear un mosaico más complejo que nos ayude a romper con la dicotomía monolítica entre ámbito privado y público.
- Discursos no normativos. Pese a que las normas sobre identidades sexuales, roles de género y jerarquización social parecían fuertemente asentadas en las sociedades antiguas, tanto por las normas legales que las definían como por las justificaciones médicas, científicas y sociales que las apuntalaban, siempre hubo grupos y personas que desafiaron o traspasaron las barreras marcadas, rompiendo con las etiquetas comunes. Así, podemos encontrar el cuestionamiento del género en el cristianismo primitivo con la figura de la mulier virilis o el ascetismo femenino, los planteamientos legales sobre personas intersexuales o las primeras fuentes sobre personas trans.
- Religión y género. El espacio religioso ha sido muy importante en la definición del papel social de hombres y mujeres, un espacio donde visibilizar las diferencias de estatus y exponer la aceptación del rol impuesto socialmente. Casos como el de la prohibición de las Bacanales en Roma, la ruptura de género de las primeras mártires cristianas o los espacios de socialización en santuarios como Brauron nos permiten explorar las consecuencias sociales del rito, la religiosidad y la espiritualidad.
- Sexo y sexualidades. En torno al sexo, la identidad sexual y las relaciones entre los géneros se ha escrito amplia bibliografía que sitúa a la Antigüedad como el origen de preocupaciones clave del mundo moderno como la homosexualidad, la bisexualidad o la transexualidad. El objetivo de esta línea es revisar la visión que tienen los antiguos de su sexualidad, cómo construyeron una identidad sexual que ha pervivido hasta nuestros días e, incluso, ofrecer/diseñar una valoración de por qué la Antigüedad ha sido percibida como un lugar de vicio y depravación por ciertos sectores.
Toda persona interesada en participar en el encuentro deberá mandar un abstract de unas 250 palabras junto con su nombre completo, datos de contacto y filiación universitaria antes del 9 de enero a laculpaesdelgenero@gmail.com
Se aceptarán propuestas en castellano, italiano, inglés, francés y portugués.
La cuota de inscripción al congreso será de 10 euros que deberán ser abonados antes de 31 de enero en la cuenta que se facilitará a las personas cuya propuesta haya sido aceptada.
El congreso se celebrará en Madrid los días 1 y 2 de marzo de 2018.
La asistencia al mismo es libre y gratuita, pero si se desea certificado de asistencia se deberá mandar un email a nuestra dirección de correo electrónico con sus datos (nombre completo y DNI).